Viaje al pasado

Hoy viajé al pasado, pero no a cualquiera, no al mío, viajé al tuyo.

Viajé a tu pasado sin permiso y vi cada persona que amaste, cuando y como lo hiciste, vi tus errores y cada estupidez que hiciste sin antes pensarlo.

Vi cómo te entregaste a las manos equivocadas y cuánto daño hiciste, las oportunidades que te tuviste que dar, las disculpas que se quedaron en el aire y tus peores caras.

Vi lo peor de ti, viajé a tu pasado y por un momento me arrepentí, de ti, de lo que sentía. Ver como fuiste en algún momento lo que hoy para mi tal vez no es lo que espero de nadie, fue difícil, hasta me sentí decepcionado, te juzgué. Sin embargo cuando volví, caí en cuenta, y recordé el pasado, mi pasado; y vi que mientras tú estabas en lo tuyo, yo estaba haciendo cosas tal vez peores, recordé mis errores.

Recordé que quién soy es el resultado de aquellos tropezones inevitables y de mis malas decisiones, que soy mejor gracias a eso, y te quise más.

Viajé a tu pasado y cuando volví, entendí que tú eres lo que eres por lo que fuiste y que cada cosa vivida te hace eso que tanto me hace sentir orgulloso, la persona que tanto quiero.

Entendí que no cambiaría nada de tu pasado porque tal vez, de no haber sido lo que fuiste hoy no fueras la persona perfecta para mí, tal vez.

Entendí que si te quiero, es por lo que hoy eres y no por lo que en algún momento tuviste que ser, que yo tampoco fui la más correcta, que con todo y lo que ahora se, sigo estando más que convencido de la decisión que tomé, de ti.